jueves, agosto 30, 2012

Biopics: Prolegómenos de la nacionalización bancaria



Muchos creían que, tras la previsible victoria de Miguel de la Madrid, los mercados financieros –y en particular el cambiario- se iban a estabilizar. Estaban equivocados.

Hubo una nueva devaluación del peso en agosto y se veía un comportamiento muy descompuesto de los mercados financieros: a cada aumento del dólar o de la tasa de interés en pesos, reaccionaban demandando más divisas extranjeras. Aquello era una espiral sin fin.

Eso significaba que una libre flotación del peso simplemente lo hundiría, y que era necesario establecer un control de cambios, que era algo que nuestra generación no conocía y que seguramente generaría problemas con los banqueros, con los otros intermediarios financieros y con los diferentes grupos empresariales que estaban especulando para salvarse del desastre, aunque se llevaran a la nación entre las patas.

El país había sufrido un proceso de desintermediación financiera desde la época de Echeverría (algo que yo constaté en mi tesis de Módena) y la recuperación en la captación fue sólo a través de la dolarización de los depósitos (esos famosos dólares que, Jonathan Davis dixit, “primero los inventamos y luego los desinventamos”). Esa situación generó que el crédito fuera caro, escaso y sobre todo dirigido al sector terciario de la economía. Un círculo vicioso.

Al mismo tiempo, una parte del endeudamiento público externo sirvió sólo para cubrir las necesidades de divisas del sector privado, una parte de las cuales se tradujo en fuga especulativa de capitales. La situación era absurda y desesperada: ¿debía el Estado contratar créditos cada vez más raros y caros para sostener un tipo de cambio atacado desde adentro por los empresarios nacionales? ¿Debía dejar que el peso se hundiera, con sus efectos inflacionarios, recesivos y de disminución de los salarios reales? ¿O debía buscar un mecanismo para controlar los usos de las divisas a partir de sus fuentes? Varios economistas nos pronunciamos expresamente por esa tercera vía: una política de control cambiario, con limitaciones a la exportación de divisas y precios diferenciados de las mismas, según sus usos. Pero era una política de difícil instrumentación.

La devaluación de agosto de 1982 incluía un “tipo de cambio preferencial”, que se usaba únicamente para el pago de intereses de la deuda externa. Esta pequeña medida causó irritación en medios empresariales, y arreció la especulación. La Asociación de Banqueros, entonces, se negó a convertir en pesos los depósitos originalmente en pesos, pero denominados en dólares (es decir, exigió al gobierno convertir en divisas los ahorros en pesos): el resultado fue, claro está, otra devaluación. En un mes, el precio dólar “libre” pasó de $54 a $120. En fin, un caos.

En esos momentos, se empezó a manejar con mayor fuerza la idea de nacionalizar la banca. Habíamos quienes considerábamos que lo principal, en términos de coyuntura, era establecer el control de cambios y que la resistencia de los banqueros a ajustarse a la normativa era lo que iba arrinconando al gobierno a una decisión más tajante: la expropiación (sobre eso publiqué, junto con Clemente Ruiz Durán, un artículo en unomásuno días antes de la nacionalización). Había quienes iban más lejos –y tal vez tenían razón porque eso se hizo evidente el sexenio siguiente-, al señalar que lo que se había roto era el pacto tácito entre las clases sociales del país: para ellos, se trataba de una confrontación eminentemente política: la iniciativa privada, encabezada por los banqueros, se enfrentaba a la institución fundamental del sistema político mexicano, la Presidencia de la República, para romper con intermediario institucional del pacto social e imponer el capitalismo salvaje. Y había otros, en el PRI y fuera de él, que consideraban que en México la palabra “nación” viene del verbo “nacionalizar”.  

En lo personal, creo que esto último –que estaba en la entraña ideológica de la generación de López Portillo- fue lo que a final de cuentas influyó más en la decisión del Presidente, lo que lo convenció como salida a la complicada situación en la que estaba. “Señor Presidente, usted pasará a la historia como el mandatario que hizo la reforma política y nacionalizó la banca”. Y JLP miraba al infinito y más allá…

martes, agosto 28, 2012

Nueva Jerusalén, ¿Estado que abdica o aplicación de la ley?



El drama del ciclo escolar que no inicia en la comunidad michoacana de Nueva Jerusalén es un indicador del lamentable estado en el que nos encontramos como sociedad y, sobre todo, de la falta de autoridad en diversas zonas del país.

Hay un derecho constitucional que está siendo abiertamente pisoteado: el que tienen los niños y jóvenes de esa comunidad al estudio. Un grupo fundamentalista se los impide violentamente, tras haber destruido la escuela que existía –demoliendo propiedad pública hasta no dejar piedra sobre piedra-  y, a cambio, sólo hemos tenido alegatos vacíos, negociaciones que no son tales y un gobierno atado de manos por sí mismo.

La “solución” planteada por las autoridades locales, que los muchachos tomen clases en escuelas de comunidades vecinas, equivale, simple y sencillamente, a la abdicación de una de las funciones fundamentales del Estado, al reconocimiento de que Nueva Jerusalén es un Estado (teocrático) dentro del Estado, en el que no rigen las leyes de la nación, sino las del supuesto iluminado que se hace llamar Martín de Tours.

Es racional que el minoritario grupo de residentes que favorecen la escuela pública se haya negado a esta charada. Es vergonzoso que el gobierno michoacano insista en negociar lo innegociable y que la Secretaría de Educación Pública hable de “mano firme” para de inmediato doblarla y agregar “pero con respeto”. ¿Respeto a qué? No es a las creencias religiosas, que cualquiera puede seguir teniendo. Tal vez sea respeto a la autoridad sustituta que se ha erigido en dicho pueblo. 

Durante mucho tiempo, tal vez en expiación por los excesos del pasado, se ha confundido el talante democrático del Estado con la debilidad para hacer frente a quienes infringen la ley. El miedo a ser represivos ha derivado en un uso casuístico y poco eficaz de los instrumentos que tiene a su disposición el Estado. Los utiliza cuando no se requieren y los deja de utilizar en otras ocasiones. Según el sapo, la pedrada. Así no se puede gobernar.

El temor es que, siendo mayoritario en Nueva Jerusalén el grupo que sigue al santón integrista, una intervención pública pueda derivar en violencia y, posteriormente, en condenas de parte de la opinión pública y publicada. En ese miedo, prefieren dejar que una mafia religiosa controle la comunidad y abstenerse de frenarla… al fin que un derecho humano como la educación no es tan espectacular.

El problema también habla de décadas de convenenciero olvido. Nueva Jerusalén está por cumplir 40 años de haber sido fundada, a partir de las visiones de una adolescente con problemas mentales. Desde sus inicios, la localidad fue objeto de reportajes periodísticos y de  fundadas denuncias de abusos, pero todo se disolvió bajo la idea de que era un lugar pintoresco, aislado y de poca o nula influencia. Un lugar extravagante en el que, fíjate que curioso, está prohibido jugar futbol, “porque es como patear el mundo, obra sagrada de Dios”. 

Han sido cuatro décadas al margen de la ley. Ahora estamos pagando, con altos intereses, los réditos de esa desidia, de ese abandono (que se ha dado en muchas otras comunidades, pero aquí degeneró en tumor).

Michoacán –donde comenzó la estrategia del presidente Calderón contra el crimen organizado- es un estado maravilloso y extraño. Baste recordar que las formas específicas que tomaron los principales grupos criminales de ahí están impregnadas de seudo misticismo: La Familia y sus “valores”, los Caballeros Templarios y su “orden”. Ha existido allí, por muchos años, tal vez desde hace casi un siglo, un caldo cultural de cultivo que los gobiernos de distinto signo político no han sabido atacar.

Si no hay una toma de decisiones que garantice, con la mínima violencia posible pero con la firmeza de un Estado que impone sus condiciones, un curso escolar normal en Nueva Jerusalén, las autoridades estatales, y también las federales, estarán enviando un mensaje muy equívoco. Si ustedes son muchos y decididos, pueden hacer lo que quieran. Si son muchos y mochos, cuánto mejor. Buscaremos, de alguna manera, el “diálogo”.

Todo esto es el síntoma de que en nuestro país las autoridades no aplican las normas como se debe, sino que suponen la existencia de todo tipo de regímenes de excepcionalidad, fueros de facto y –a veces- de jure. En ese sentido, tienden a ver este problema –que, insisto, es de derechos humanos fundamentales- como un pleito entre particulares, en el que lo más que se puede hacer es intermediar.

La política del avestruz tal vez sirvió con anterioridad. Ahora ya no. El problema ha estallado en la opinión pública nacional y mundial. Se precisan decisiones. Se exige la presencia real, no solamente simbólica, de la autoridad. Se requiere de infraestructura, de una escuela pública funcional, de seguridad pública y de vigilancia constante. Es la única solución en el contexto de la ley.


miércoles, agosto 22, 2012

Delegación olímpica mexicana 2012; evaluación atleta por atleta III

Esta es la tercera y última entrega de la evaluación.

Pentatlón Moderno
 
Tamara Vega, 36º lugar general (22º en esgrima, 23º en natación, 35º en equitación –por una caída, que le impidió participar en la prueba combinada de tiro y  campo traviesa). Habrá sido la mala suerte que corrió con el caballo que le tocó en la prueba de salto; el caso es que la mexicana –que en las primeras dos pruebas estuvo abajito de media tabla- terminó en último lugar. D

Oscar Soto, 14º lugar general (20º en esgrima, 30º en natación, 17º en equitación y 7º en la combinada de carrera a campo traviesa y tiro). La diferencia, frente a la actuación relevante que el campeón panamericano tuvo en Pekín estuvo, fundamentalmente, en la esgrima. También bajó en equitación (pero ahí siempre se depende en algo del caballo). Siguió flojo en natación y cerró fuerte en la combinada (lo que implica una mejora en tiro).  C+
 
Remo

Femenil
Debora Oakley, 22º en single-sculls. Su mérito real fue calificar a los juegos. Desde el primer heat se fue definiendo su posición, que en la final D no cambió. C-

Varonil
Patrick Loliger. 13º en single-sculls. El remero mexicano más consistente inició calificando sin problemas a cuartos de final. En éstos, peleó y se quedó en la raya, refrendó su nivel en la semifinal C/D y terminó mejorando dos puestos respecto a Pekín. C+


Taekwondo

Hace no mucho, México era una de las potencias en el taekwondo mundial, pero las grillas y las insidias de grupo cobraron finalmente su factura en Londres. Dos taekwondoines con un palmarés importante, los que habían ganado las plazas varoniles para México, Damián Villa e Idulio Islas, fueron sustituidos sin una explicación clara. Resultó extraño ver a la ahora ex campeona olímpica María del Rosario Espinoza agradecer profusamente a la Conade por haberla apoyado en su cambio de entrenador y que éste fuera a los Juegos. Se ve que sufrió por mantener a Pedro Gato. Si sumamos los problemas de habituarse a los petos electrónicos, se puede deducir que a la federación, que no cumplió las expectativas, le falta mucho por hacer.

Femenil
María del Rosario Espinoza, Medalla de Bronce, + de 67 Kg. La sinaloense estuvo lejos de la gran competencia que tuvo en Pekín, pero con garra y dolor pudo subir de nuevo al podio. En su primer combate se deshizo con problemas 3-2 de la camboyana Devin Sorn; María del Rosario estuvo poco agresiva y abusó del puñetazo al peto. En cuartos de final perdió apretadamente, por 6-8 –y de manera injusta, según algunos- con la serbia Milica Mandic, a la postre campeona olímpica. El paso de Mandic a la final puso a Espinoza en el repechaje. Ahí destrozó 13-0 a la novata de Samoa, Taitinga Crawley, que le propinó un golpe artero en el rostro y se llevó el bronce tras vencer 4-2 a la cubana Glenhis Hernández, que también tenía sus mañas. Lloró emocionada por concluir con éxito un ciclo olímpico que le resultó bastante complicado.  A

Janett Alegría, - de 49 Kg. 5º lugar. Janett inició su periplo con una victoria clara 12-1 sobre la novata jordana Raya Hatahet, para luego perder en semifinales 0-8 en un combate lastimoso, en la que se vio medrosa y poco agresiva, ante la española Brigitte Yague. El repechaje la colocó de nuevo en la pelea. Venció fácilmente 7-2 a la panameña Carolena Carstens y se enfrentó por el bronce con la croata Lucija Zaninovic. Ese combate se fue a punto de oro, y faltando 41 segundos para el final, un intento de puñetazo en el peto de parte de Alegría se convirtió, casi de manera fortuita, en el bronce para la croata. En resumen, ganó fácil las peleas fáciles, fue vapuleada en la difícil y perdió el combate parejo. B-

Varonil
Diego García, - de 58 Kg. Eliminado en la primera ronda. El joven hizo su esfuerzo ante el australiano Safwan Khalil, pero perdió 4-9 ante un rival que, sin ser la gran cosa, era evidentemente superior. Aquí, la culpa más que del joven practicante de taekwondo es de quien lo envió a Londres. C-

Erick Osornio, - de 68 Kg. Eliminado en la primera ronda. Cayó 2-5 ante el británico Martin Stamper, sin dar gran batalla pero sí  muestras de que su carrera está en el ocaso. Resulta preocupante constatar que Erick, y no Idulio Islas, fue quien tenía los méritos para representarnos en  Pekín, pero asistió Idulio. Ahora sucedió exactamente lo contrario. El resultado, igualmente desilusionante. D


Tenis de mesa

Yadira Silva, eliminada en primera ronda. Cayó ante la adolescente estadounidense
Ariel Hsing, por marcador de 9-11, 8-11, 3-11 y 5-11. Era un juego que podía ganar, o al menos hacer más competido. Se pudo observar que tras perder el segundo set se derrumbó psicológicamente. D

Tiro

Femenil
Rosa Peña, 35º en rifle de aire a 10 m. La jovencita hizo una prueba al nivel que se esperaba, que no podía ser mucho. C-

Alexis Martínez, 39º en rifle 3 posiciones a 50 m. Estuvo muy bien en la posición de tendido, pero perdió toda posibilidad de pasar a la final en las posiciones de pie e hincada. C-

Alejandra Zavala, 19º en pistola de aire a 10 m. Tras las dos primeras rondas, peleaba la calificación a la final. En las últimas dos, se vino abajo. Aún así, resultó la tiradora americana mejor calificada en la prueba. B-

Varonil
Javier Rodríguez, 24º en skeet.  Salvo una buena primera ronda, nunca estuvo en la pelea y terminó debajo de media tabla. C-


Tiro con Arco

Esta disciplina fue una de las más satisfacciones dio en los juegos, y también más emociones. La federación ha sido apoyada y ha respondido, poniendo, además, énfasis en los jóvenes. Se prevé un boom en la práctica de la arquería en México.

Femenil
Equipo, 7º lugar, eliminado en cuartos de final. Las buenas puntuaciones en la ronda de calificación colocaron a las arqueras mexicanas directamente en cuartos de final, pero ese día encontraron un equipo japonés inspirado, que las privó de seguir avanzando. El equipo en general se vio compacto. B

Aída Román, Medalla de Plata. Calificó originalmente en el lugar número 11, enfrentó en primera ronda a la kazaja Bannova, a quien derrotó 6-2 (102-98); luego a la india Laishram, que fue vencida 6-2 (107-93); en octavos de final se vengó de la japonese Miki Kanie por 7-.3 (131-129); en cuartos, dio cuenta de la italiana Pia Leonetti, a quien destrozó psicológicamente con un 10-X-X en el tercer ser, por 6-2 (109-102). La semifinal entre mexicanas fue de ella, venciendo a Mariana Avitia 6-2 (104-97) y en la gran final llegó a la flecha de oro con la campeona mundial y favorita Kim-Bo-Bae, que se resolvió por milímetros. Temple, clase y calidad. A+

Mariana Avitia, Medalla de Bronce. Calificó originalmente como número 10. En primera ronda derrotó 6-2 (108-99) a la iraní Dehganavi; en la segunda, 6-2 (110-107) a la local Folkard; en octavos, deshaciendo psicológicamente a la danesa Christiansen 6-2 (109-91). El mejor momento fue la victoria en cuartos de final sobre la coreana Sung Jin Lee, favorita al podio, 6-2 (112-111). El final de Mariana en esa justa fue impresionante: 6 de sus últimas 7 flechas fueron de 10. Luego perdió la semifinal con Aída y en la disputa por el bronce aguantó mejor la presión y fue superior a la famosa estadounidense Khathuna Lorig, a la que venció 6-2 (104-98). Excelente. A+

Alejandra Valencia, eliminada en la segunda ronda. Primero derrotó 7-1 (103-90) a la estonia Parnat, pero cayó ante la china Cheng por el mismo 1-7 (101-106). C+

Varonil
Equipo, 4º lugar. Tras una tranquila victoria 216-211 sobre el equipo de Malasia, los arqueros mexicanos dieron una gran y compacta exhibición ante Francia, a la que vencieron 220-212. Llevaban ventaja en la última ronda ante Italia, pero los tranquilos italianos se crecieron y ganaron la semifinal 217-215. Hicieron una buena lucha por el bronce ante Corea del Sur, pero un 5 de inicio hizo que toda la justa fuera cuesta arriba. En el match contra Italia, Vélez se vio un poquito inconsistente; contra Corea, tocó turno a Serrano. A-

Luis Álvarez, eliminado en segunda ronda. Tras el nervio de la ronda clasificatoria, que lo sembró 30º y acabó por determinar su sino, el ya popular Abuelo se despachó de entrada al búlgaro Hristov por 6-0 (84-77), pero luego le tocó enfrentar a quien se coronaría campeón olímpico, el coreano Jin Hie Oh. Fue un duelazo de poder a poder. Oh ganó apretadamente dos sets, Álvarez hizo un set perfecto y dos sets quedaron empatados. Al final, la puntuación fue para Oh 6-4, pero en el total, Álvarez colocó 140 puntos frente a139 del coreano. Hay que decir que el coreano no enfrentó a otro rival tan duro hasta la semifinal (con el medallista de bronce Dai, de China) y ni siquiera la final estuvo tan reñida como los duelos con el chino y el mexicano. A  

Juan René Serrano, eliminado en segunda ronda. Tuvo al menos la oportunidad de eliminar a su doble verdugo, el italiano Galliazo, por 6-2 (pero 102-104). Luego se topó con el británico Godfrey y perdió 1-7 (107-111). B-

Eduardo Vélez, eliminado en segunda ronda. Venció fácil, por 7-1 (111-105) al iraní Vaziri, pero cayó ampliamente ante el futuro medallista, el chino Dai, 6-0 (82-76). B-


Triatlón

Femenil
Claudia Rivas, 21º lugar. Hizo una prueba más que decente, dadas las expectativas. Fue 5ª en nado, 19ª en bicicleta y 33ª en la carrera. B-

Varonil
Crisanto Grajales, 28º lugar, de acuerdo a lo esperado. Fue 41º en nado, 36º en bicicleta y 20º en la carrera. C

Vela

Tania Elías Calles, 10º lugar en Laser Radial. La eterna esperanza mexicana en vela nunca estuvo cerca del medallero, y pareció que su meta era calificar a la final como parte del top ten, cosa que logró. C

Ricardo Montemayor, 38º lugar en Laser varonil. En una regata llegó en el lugar 11º; en seis regatas, más allá del 40º.  D+

David Mier y Terán, 32º lugar en tabla-vela. De poco le sirvió la experiencia olímpica de Pekín, en ninguna regata llegó en la primera mitad del grupo. Bajó 15 puestos respecto a 2008. D-

martes, agosto 21, 2012

Delegación olímpica mexicana 2012; evaluación atleta por atleta II

Continuamos con la evaluación de la delegación mexicana en Londres.

Ecuestres

Fuera del Gran Prix de Adiestramiento, fuera de la Prueba de Tres Días (donde no tendremos nada hasta que los miembros del Ejército retomen el mando), apenas calificados en Guadalajara para la prueba de Salto… y en Londres una gran actuación individual tuvo a México cerca del podio.

Michan y Rosalía La Silla
Equipo de Salto, (Alberto Michan, Nicolás Pizarro, Federico Fernández, Jaime Azcárraga), 9º lugar en la prueba por equipos. Una monta excepcional, una regular, otra mediocre y la última de plano mala se combinaron para dejar a México a un escalón de una final inesperada. C+

En lo individual, Alberto Michan, 5º lugar, montando a Rosalía La Silla, una yegua extraordinaria de 11 años fue el mejor desde la primera ronda, que fue perfecta. Repitió recorrido limpio en la segunda. Calificó con dos derribes y un segundo de penalización la tercera. En la primera vuelta de la final, tuvo un solo derribe, que lo colocó undécimo al llegar a la ronda definitiva. La segunda vuelta fue perfecta, así que ese derribe solitario privó a la dupla mexicana del podio: A
Nicolás Pizarro, 44º lugar, sobre Crossing Jordan fue consistente en ser el segundo lugar del equipo mexicano. 4 puntos de penalización en la primera ronda, 8 en la segunda y 28 en la tercera (con lo que quedó fuera de la final) C
Federico Fernández, 53º lugar, en Victoria, tuvo 5 puntos de penalización en la primera vuelta y 11 en la segunda. Ya no pasó a la tercera. C-
Jaime Azcárraga, 67º lugar, tuvo una mala jornada sobre Gangster, 12 puntos de penalización en un recorrido relativamente fácil. No pasó a la segunda ronda y su registro, afortunadamente, no contó para México en la competencia por equipos: D


Esgrima

Úrsula González, 33º, eliminada en la primera ronda de sable individual. Su rival, la coreana Kim resultó a la postre campeona olímpica. El caso es que Úrsula no le dio ni sombra de pelea y perdió 15-3. D+

Daniel Gómez, 17º, eliminado en la segunda ronda de florete individual. Dio una gran batalla ante el croata Jovanovic, al que derrotó 115-14 en tiempo extra. Luego no pudo con el chino Ma, al que le dio un poquito de batalla para perder 8-15. C+


Futbol

Equipo masculino, Medalla de oro. El Tri olímpico resultó ser la mejor noticia de la delegación, en un torneo en el que fue claramente de menos a más. Tras un feo empate a cero con Corea –una escuadra que no dejó jugar-, obtuvo una decente victoria 2-0 contra Gabón (doblete de Giovani dos Santos) y cerró la fase de grupos con el 1-0 frente a Suiza (gol de Oribe Peralta). El partido más complicado sería el de cuartos de final, contra Senegal, en el que una grandísima actuación del portero José de Jesús Corona evitó que los africanos le dieran la vuelta al partido y dos desatenciones senegalesas permitieron a México ganar 4-2 en tiempo extra (goles de Enríquez, Aquino, Dos Santos y Herrera). En la semifinal contra Japón se vio empaque, capacidad de respuesta y contundencia: 3-1 con goles de Fabián, Peralta y Cortés. La final, vista por todo México, contó con la garra para robar balones, la habilidad para rematar (el doblete de Oribe Peralta) y una defensa en su punto para derrotar 2-1 a Brasil.
El equipo se lleva una A+, pero en lo personal señalo a José de Jesús Corona, Diego Reyes, Chatón Enríquez, Giovani Dos Santos y Oribe Peralta como excelentes dentro del muy buen desempeño general, así como al director técnico Fernando Tena por haber hecho varios ajustes pertinentes luego del inicio trastabillante.

Gimnasia

Esta disciplina podría dar mucho más, pero los entrenadores se han visto obligados a buscar apoyos locales porque apoyo nacional no hay. De hecho, el centro de la gimnasia en México en estos momentos es Monterrey. Nuestro mejor exponente entrena en Estados Unidos.

Femenil
Elsa García, una lesión le impidió participar en todas las pruebas. Sólo pudo hacerlo en viga y en ejercicios a manos libres. En la primera quedó en el lugar 58º; en el piso terminó en lugar 35º. D+

Varonil
Daniel Corral, 5º en barras paralelas; 61º en caballo con arzones. Corral se fijó claramente su meta de llegar a una final olímpica y, por ello, se enfocó a los dos aparatos que mejor domina. Una caída del caballo con arzones acabó con sus aspiraciones en uno de ellos, pero estuvo excelso en las barras paralelas. Un ligero rozón en la final lo privó de ser el primer mexicano medallista olímpico en gimnasia. Tal vez en Río. A


Halterofilia

Una federación desgastada por las grillas, en la que una mejor planeación hubiera permitido competir con más plazas en Londres, pero que sigue dando algunos frutos.

Femenil
Luz Acosta, 6ª en -63 kilogramos, con 224 kg. La sonorense demostró que era correcto que ella fuera la elegida para asistir a Londres en la rama femenina. Sin haber hecho una competencia extraordinaria (levantó en arranque menos que en Pekín y en total menos que en Guadalajara) se mantuvo en el grupo de las fuertes. Aún si hubiera hecho buenos todos sus levantamientos, la medalla estaba lejos. A-

(Tras la eliminación de tres competidoras por dopaje, Luz Acosta se hizo a acreedora a la medalla de bronce)

Varonil
José Lino Montes, 6º en -56 kilogramos, con 269 Kg. El llamado “Hércules Tekaxeño” es el primer halterista mexicano varonil en mejorar un 8º lugar olímpico. Su debilidad sigue siendo el arranque, donde una falla técnica le impidió superar su marca personal de 115 Kg. En envión demostró que es uno de los hombres más fuertes de su categoría. Igual que a Acosta, una competición perfecta lo hubiera acercado a las medallas, pero no colocado en el podio. A-


Judo

Femenil
Vanessa Zambotti, + de 78 kg.,  eliminada en la primera ronda. El sorteo fue cruel con Zambotti, poniéndola de entrada contra la entonces campeona olímpica y campeona mundial Wen Tong, que la venció por ippon con la técnica Kami-shiho-gatame tras poco más de un minuto de pelea. C-

Varonil
Nabor Carrillo, -60 kg, 9º lugar.  El subcampeón panamericano venció por ippon con la técnica Seoi-nage al camboyano Phom; luego se enfrentó al italiano Elio Verde, un combate muy apretado. Ambos tenían un yuko a favor y un castigo en contra cuando en tiempo extra, Verde aprovechó un descuido para el ippon definitivo. B

Lucha

Guillermo Torres - de 60 kg, libre, eliminado en la primera ronda. El mexicano luchó y logró hacer un puntito en el segundo round pero la ventaja de su rival iraní era tan larga como su apellido: Esmailpoorjouybari. C-

Jesse Ruiz - de 120 kg., libre, eliminado en repechaje. Tuvo dos combates y recibió dos felpas. Primero, de un finalista georgiano, que le permitió buscar repechaje de bronce. Allí también su rival, un kazajo, lo puso fácilmente contra la lona. D


Nado Sincronizado

Regresó Adriana Loftus, pero tiene que remar contra la corriente en un deporte cuyo nivel de dificultad ha aumentado y en el que no sólo cuenta la actuación; también importa el prestigio adquirido en años

Dueto (Nuria Diosdado y Blanca Delgado) 18º lugar, sin acceder a la final. Bonitas rutinas, pero se notaba la diferencia técnica con las finalistas. C-


Natación

Es una federación que ha tenido apoyo y que sólo tiene resultados en clavados. Los jóvenes prospectos se desgastan en competencias semanales para entretenimiento familiar y no hay un proyecto serio a futuro. A Londres sólo calificaron directamente Fernanda González y Lizett Rueda (en aguas abiertas); los demás fueron con marca “B”, como para que no se viera nuestra orfandad en este importante deporte. Esta vez ni siquiera se rompieron récords nacionales. Sin cambios de fondo, se antoja difícil la meta de 4 finalistas para los mundiales de natación en Guadalajara 2015.


Femenil

Liliana Ibañez, 26º en 100 m. libres, con 57.51; 26º en 200 m. libres con 2:01.36. En ningún caso mejoró sus tiempos personales. C-


Patricia Castañeda, 27º en 800 m. libres, con 8:44.44; lejísimos de sus marcas, parecía que sólo volvió a entrenar cuando supo que sí iba a Londres. D

Erica Ditmer, 27º en 200 m. combinado, con 2:16.54. C-

Fernanda González, 23º en 200 m. dorso, con 2:12.75; mejoró dos segundos y cinco lugares respecto a Pekín; 23º en 100 m. dorso, con 1:01.28; mejoró segundo y medio y 12 lugares respecto al 2008. Estuvo cerca, pero no mejoró sus marcas personales ni logró su meta de conseguir al menos una final B.  C-

Rita Medrano, 23º en 200m. mariposa, con 2:11.42. C-

Susana Escobar  27º en 400 m. libres, con 4:14.76, más de dos segundos por arriba de su marca en Pekín. D

Lizett Rueda, 21º en maratón 10 k. aguas abiertas, con 2:02:46.1. Nunca estuvo en competencia. Lo bueno fue que terminó la extenuante prueba; lo malo, que fue la penúltima en hacerlo. C-

Varonil

Arturo Perez Vertti, 22º en 1,500 m. libres, con 15:25.91; mejoró su marca personal. Con ello resultó ser el único nadador con marca “B” que justificó plenamente su presencia olímpica. C+

Christian Schurr, 26º en 200 m. pecho, con 2:14.16. Renunció a los 100 pecho para centrarse en los 200, igual no pasó nada. C-


viernes, agosto 17, 2012

Delegación olímpica mexicana 2012; evaluación atleta por atleta I


Así como hicimos hace cuatro años, intentaremos aquí, en varias entregas, hacer una evaluación particularizada –y necesariamente subjetiva- del desempeño de las disciplinas y los atletas mexicanos en los XXX Juegos Olímpicos, de Londres 2012. A los deportistas se les otorga una calificación “a la gringa” (A= muy bien; B= bien; C= regular; D= mal, pero aprobado; F= reprobado) en la que se toman en cuenta dos factores. Uno es la expectativa que generaron en función de sus resultados anteriores. Otro es el hecho indiscutible de que todos hicieron un esfuerzo para calificar e intentaron dar lo mejor de sí en sus competencias olímpicas. El resultado es de claroscuros y difuminados. Puede servir para revisar lo que se está haciendo bien, pero sobre todo para bajar humos, que hay unos que vuelan muy alto.


Atletismo

Durante 4 olimpiadas consecutivas, México obtuvo podio olímpico en atletismo. La seguidilla se interrumpió en Pekín y la sequía continuó en Londres. Ya habíamos notado los bajones en esta disciplina tanto en los JCC de Mayagüez como en los Panamericanos de Guadalajara. Lo sucedido en Inglaterra confirma la tendencia en el deporte que más medallas otorga y nos recuerda el caos que vive la federación del ramo, una federación que alguna vez fue rica y exitosa y ahora no tiene recursos y se la pasa en pleitos legales.
Un mediofondista y dos marchistas fueron los únicos medianamente competitivos en la delegación (que se vio incrementada con atletas de marca “B” para dar gusto al propósito de Conade de cumplir la cuota de 100 deportistas olímpicos).

Femenil

5,000 metros planos
Sandra López, 33º lugar, con 15:55.16. Fue penúltimo general y la última de su heat, 20 segundos atrás del lugar anterior. Declaró que le habían temblado las piernas, muestra de que no estaba preparada para los Juegos y de que enviarla con su marca “B” fue un error. D-

Marcha 20 Kilómetros
Mónica Equihua, 30º lugar, con 1:32:28. Más que el lugar, debe destacarse que Mónica rompió su marca personal (lo que nos habla del bajo nivel general de la marcha femenina mexicana). Llegó con marca “B”, se agradecen su esfuerzo y mejoría. C

Maratón
Marisol Romero, 46º lugar, con 2:33:08. La campeona panamericana de medio fondo no pudo con la prueba más larga del atletismo. C-
Karina Pérez, 50º lugar, con 2:33:30. Mejoró respecto a Pekín en tiempo y lugar, pero eso no hace que su desempeño haya sido siquiera regular. D+

Varonil

200 metros planos
José Carlos Herrera, 45º lugar, con 21.17. Hizo lo esperado para un atleta con marca “B”, penúltimo en su heat, muy lejos de los contendientes. C-

5,000 metros planos
Juan Luis Barrios, 8º lugar, con 13:45.30. Juan Luis hizo bien en saltarse los 10,000 metros para concentrarse en la otra prueba. Como hace 4 años, estuvo a punto de quedar fuera por una estrategia conservadora en las eliminatorias. Lo extraño es que la repitiera en la final, que fue totalmente estratégica y no de velocidad. A-

10,000 metros planos
Diego Estrada, 21º, con 28:36.19. A diferencia de los 5,000, esta prueba fue relativamente rápida. Demasiado para las capacidades del mexicano. C-

Maratón
Daniel Vargas, 39º, con 2:18.26. Hizo una competencia aceptable, intentó remontar posiciones, pero se topó con el “muro” después del kilómetro 30. C
Carlos Cordero, 60º, con 2:22:08. Conservador, nunca dio pelea. Corrió mucho mejor el maratón en Pekín. D+
Arturo Malaquías, 70º, con 2:26:37. Acompañó a Cordero durante un buen trecho, luego no aguantó tampoco ese ritmo de media tabla D

Marcha 20 Kilómetros
Eder Sánchez, 6º lugar, con 1:19:52. Aguantó 16 kilómetros en el grupo puntero de elite, pero entre las amonestaciones que sufrió y el último jalón de los ganadores, no le alcanzó. Demostró su buen nivel. Esta vez su pretexto, los calzoncillos ajustados, sí tenía cierta razón de ser (como se vio al cambiar otros fondistas de shorts). A-
 Isaac Palma, 34º lugar, con 1:23:35. Intentó mantenerse a media tabla, pero terminó desfondándose en una competencia que resultó muy rápida. C-
 Ever Palma: 46º lugar, con 1:26.30. Le sucedió igual que a su hermano, pero varias posiciones abajo. Fue antepenúltimo entre los que pudieron terminar la prueba. D+

Marcha 50 Kilómetros
Horacio Nava, 16º lugar, con 3:46:59, muy lejos de su mejor marca personal en la distancia. Como siempre, inició conservador, pero su ritmo era tan inferior al de los punteros, que los rebases de la segunda mitad de la competencia apenas alcanzaron para el puesto que consiguió. Tal vez pecó de precavido. B-
Omar Zepeda, 23º lugar, con 3:49:14. Acompañó a Nava buena parte de la prueba (y no sabemos si Horacio lo jaló o él lo contuvo). Igual rebasó al final, pero sin la misma potencia. C
José Leyver, 28º lugar, con 3:55:00. A diferencia de los otros dos, inició más competitivo y empezó a perder posiciones a partir del kilómetro 30. C-

Salto de Longitud
Luis Rivera, 32º lugar, con 7.42 m. Había sorprendido con su buena marca de clasificación a los Juegos Olímpicos, pero su especialidad requiere de consistencia, que él no tiene. Quedó a 50 centímetros de la marca para llegar a la final. Mucho ruido y pocas nueces. D

Lanzamiento de bala
Stephen Sáenz, 32º, con 18.65 m., lo cual es normal para alguien que llegó con marca “B”. Al menos hubo representación simbólica en lanzamientos. C-


Badminton

Otra federación que vive entre denuncias, con resultados ínfimos, teniendo en cuenta que este deporte se practica bastante en el país.

Victoria Montero perdió los dos juegos de su grupo en singles. El primero lo jugó con pundonor, pero con claras deficiencias técnicas y físicas. Cayó ante la finlandesa Anu Nieminen 21-12 y 21-18. En el otro juego, la taiwanesa Tzu Ying Tai la barrió 21-6, 21-10.  C-


Boxeo

Es un cuento de nunca acabar, a partir de que la Federación de Boxeo tiene una suerte de presidencia vitalicia y Ricardo Contreras, Secretario General del COM,  la maneja como su feudo. Las diferencias por dinero –ya que la Federación no quiere ser fiscalizada- redundan en escaso fogueo internacional de nuestros púgiles. A la presidencia eterna, también corresponde un banquillo eterno. A pesar de la calidad natural de nuestros boxeadores, eso no puede traer buenos resultados (un bronce en 20 años). Ahora sólo dos boxeadores clasificaron a Londres, en una disciplina que va como el cangrejo. Para colmo, el sistema de puntaje en el boxeo olímpico sigue dando motivos para la polémica.

Óscar Valdez, 5º lugar, peso gallo. Boxeador con estilo y garra, inició con una victoria 14-9 ante el indio Shiva Thapa. Siguió contra el medallista de bronce mundial, Ambar Yusonov, de Takijistán y le puso una soberana felpa, pero los jueces sólo lo vieron ganar 13-7. En cuartos de final se enfrentó al elusivo irlandés John Joe Nevin (quien sería a la postre medallista de plata) y equivocó táctica (lo que hay que atribuir al banquillo). Aunque tiró a Nevin de un severo golpe al hígado, el irlandés se dedicó a colocar golpes y a esquivarlos, sin importar la contundencia de los golpes del mexicano, que en la lógica del puntaje olímpico sólo hubiera podido ganar por RSC. El score, 19-13, no habla de lo cerrada que fue la pelea. De nuevo, para el púgil mexicano que se quedó en la raya, una medalla de bronce hubiera sido justa. A-

Óscar Molina, peso welter, eliminado en la primera ronda. Fue derrotado 12-8 por el canadiense Custio Clayton. Buen estilo, pero le faltó agresividad. C-


Canotaje

José Everardo Cristóbal Quirino, 10º en C-1 1,000 metros; 19º en C-1 200 metros. El michoacano mejoró respecto a Pekín y estuvo a medio segundo de calificar a la final de la especialidad, que es la de 1,000 metros. En varias pruebas de más a menos. Después fue inscrito en 200 metros, al parecer nada más para intentar sacarse –infructuosamente- la espinita. C+

Ciclismo

Hubo un tiempo en el que la federación de ciclismo se desentendió de la ruta y se enfocó a unos cuantos competidores de pista. Ahora ni eso (y ni soñar en ciclismo de montaña o BMX). Apenas calificaron dos deportistas para la ruta. Como desde años, un desorden que no se merece un deporte ampliamente practicado en nuestro país.

Ingrid Drexler, 41º lugar en ruta femenil, fuera del tiempo límite. Simplemente fue de las que no aguantó el ritmo de competencia. C-

Héctor Hugo Zamarrón Rangel, 39º lugar en ruta varonil (o 27º mt). Hizo una carrera buena para su nivel, manteniéndose en el pelotón. C


Clavados

México llevó un equipo poderoso en clavados y obtuvo tres medallas, que pudieron haber sido más. Esta disciplina ha sido apoyada y ha respondido, superando a menudo problemas internos derivados –casi siempre- de la propia competencia entre clavadistas y entrenadores. En ese sentido, ha sabido transformar la competencia en mejoría y no en dispersión de energía y esfuerzos. Además, se ve que hay un interesante relevo generacional que permite ver el futuro con esperanza.

Femenil

Plataforma 10 m. Sincronizados
Paola Espinosa y Alejandra Orozco. Medalla de Plata. La pareja mexicana obtuvo claramente el segundo lugar con una competencia sólida, en la que se dieron a notar la experiencia y gran calidad de Paola y el extraordinario temple de la jovencita Orozco. A+

Plataforma 10 m.
Paola Espinosa, 6º lugar. Tuvo una competencia irregular desde las eliminatorias. En la final, exactamente como en Pekín, le volvió a fallar el mismo clavado en reversa, de tres y media vueltas en posición C; pero ahora tampoco estuvo bien en el último clavado, que con una ejecución buena, pero no extraordinaria, la hubiera puesto en el podio en una competencia en la que tuvo mucho a su favor.  B-
 Carolina Mendoza, 21º lugar. Le costó el debut olímpico a la jovencita. Estuvo en competencia, pero falló rotundamente dos clavados. Curiosamente, los mismos que no pudo ejecutar bien Paola Espinosa en la final. C

Trampolín 3 m.
Laura Sánchez, Medalla de Bronce. Tuvo finalmente el justo premio a una vida dedicada a su deporte, que superó circunstancias dignas de un culebrón. La constancia fue la clave. Sin llegar a niveles de excelsitud, metió de manera impecable todos los clavados, soportó la presión y al final ella fue quien la puso. Una medalla particularmente dulce, porque no estaba entre las esperadas. A+ Arantxa Chávez, 29º lugar. Le ganó la ansiedad y eso se notó desde el primer clavado, que falló miserablemente. Nunca se pudo reponer. Tiró dos clavados regulares, con el intermedio de uno pésimo y cerró casi tan mal como comenzó. D-


Varonil


Plataforma 10 m. Sincronizados

Iván García y Germán Sánchez, Medalla de Plata. La pareja de jóvenes kamikaze dio un gran espectáculo, con una serie de clavados que superaba, por muchos puntos, las de sus rivales. Tienen espacio de mejoría en los clavados obligatorios, que les han de parecer demasiado sencillos, pero son importantes. Tres de sus clavados libres eran muy complicados, y los ejecutaron más que correctamente. En el que tenía grado de dificultad similar al de sus competidores, fueron tan excelsos como los chinos. A+

Plataforma 10 m.
Iván García, 7º lugar. El Pollo brilló en la que ha sido considerada la prueba de clavados de más alto nivel en la historia, pero no le fue suficiente para alcanzar el podio. Aún llevándose un 8.0 en el salto con 4.1 de dificultad, acabó por no ser contendiente. A-
Germán Sánchez, 14º lugar. El Duva iba entre los tres primeros lugares, incluso mejor que su compañero en una peleadísima semifinal que dejó fuera al campeón olímpico Matthew Mitcham, cuando falló un clavado (el 626C). A pesar de que los siguientes fueron muy buenos, ya no pudo avanzar más. B

Trampolín 3 m. Sincronizados
Yahel Castillo y Julián Sánchez, 7º lugar. Aquí la historia fue al revés de quienes obtuvieron plata en sincronizados. Los mexicanos empezaron muy bien, y fueron a la baja. En particular los tres últimos clavados del Monstruo Sánchez estuvieron fallidos, y eso los hundió. Yahel estuvo bien, pero Sánchez no se vio relajado, tal vez porque no se solucionó con facilidad el asunto de la representación en la competencia individual. B-

Trampolín 3 m. Sincronizados
Yahel Castillo, 6º lugar. Tras excelentes preliminares, Yahel estuvo adelante durante buena parte de la final. No haber alcanzado la excelencia en su penúltimo clavado (de sólo 3.0 de dificultad) lo sacó del primer lugar. Haber fallado lamentablemente el último, lo botó del podio. A-
Daniel Islas, 23º lugar. Habrá sido el problema con Julián Sánchez por la definición de los competidores, habrán sido los nervios de los primeros Juegos Olímpicos, pero no se vio a su mejor nivel. No tuvo fallos clamorosos, pero tampoco un solo clavado que pudiera definirse como bien realizado. C-